De grande nos cuenta "le decían" que si no había tenido infancia, que le parecía una atracción infantil pero ella fue heredando las muñecas de su hija y de todas las personas que le querían obsequiar cada una con mucho cariño. Hoy TEMPORaDA® puede ver su bella colección que nos muestra con mucho orgullo y que mantiene en perfección, muy cuidadas y en sus cajas para que conserven su originalidad.
Un consejo para todos "cuiden mucho sus piezas para que sean valoradas en el tiempo", y no se conviertan en un gasto superfluo sino en una inversión.